Nene: El aliado de Rubiales bajo la lupa por bloquear un embargo de criptomonedas, según la jueza | Fútbol | Deportes | EL PAÍS
Un inesperado giro en la investigación sobre las supuestas irregularidades en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) durante la presidencia de Luis Rubiales ha captado la atención. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha enviado a Delia Rodrigo, titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Majadahonda (Madrid), un informe que advierte de la desaparición de 65.367 criptoactivos USDT (con un valor actual de 62.800 euros), supuestamente pertenecientes al empresario y exfutbolista Francisco Javier Martín Alcaide, conocido por el apodo de Nene, quien es amigo y socio del expresidente de la federación. Estos activos habían sido bloqueados por orden de Nene, pero se desvanecieron cuando los investigadores intentaban transferirlos a una cuenta segura para evitar cualquier desvío. El informe indica a cuatro ciudadanos colombianos como presuntos implicados en esta maniobra y destaca la conexión de uno de ellos con el propio Nene, a quien, en última instancia, se le responsabiliza. La UCO ha solicitado a la jueza que emita una orden internacional de búsqueda y captura contra los cuatro sospechosos.
En el informe, al que ha tenido acceso EL PAÍS, la Guardia Civil recuerda que esta línea de investigación se inició el pasado 20 de marzo, el mismo día que la Guardia Civil realizaba las primeras siete detenciones y registraba la sede de la RFEF en la bautizada como Operación Brodie. Ese día, los agentes recibieron la llamada de C. V. B., quien aseguraba que había realizado inversiones en criptoactivos a un empresario de Granada que podía estar presuntamente implicado en la trama desmantelada. Se refería a Nene, un exjugador que nunca pasó del tercer escalón del fútbol español, metido a empresario hotelero tras dejar el balón y que mantenía una estrecha relación de amistad con Rubiales. De hecho, él era la persona que se encontraba con el expresidente de la federación en República Dominicana cuando se produjeron aquellos primeros arrestos.
La investigación reveló que, efectivamente, Nené invirtió en agosto de 2022, junto a otras dos personas, 60.000 euros en criptoactivos y que estos fondos pasaron poco antes del inicio de la Operación Brodie a un monedero virtual bajo su control con la supuesta intención entonces de retirarlos en República Dominicana, donde tenía negocios. De hecho, en uno de los móviles intervenidos a Nene los agentes encontraron dos “frases semillas” (claves privadas de 12 palabras necesarias para poder realizar transacciones desde una dirección con criptoactivos) que, según las pesquisas, están vinculadas a 140 direcciones donde supuestamente se podrían ocultar más fondos en monedas virtuales. Con estos datos, la UCO solicitó a la empresa de criptomonedas que bloquease temporalmente este dinero, medida que en octubre respaldó la jueza Rodrigo con la indicación de que esos fondos fueran transferidos a la Oficina de Recuperación y Gestión de Activos (ORGA), un organismo creado por el Ministerio de Justicia a finales de 2015 para administrar el embargo de bienes bloqueados e intervenidos a personas condenadas.